A principios del siglo pasado, algunos de los elementos utilizados en la rebotica para la preparación de medicamentos, había que ir a buscarlos a ultramar, desde Asia hasta América latina. Por supuesto se trataba de productos que ni la flora y ni la fauna europea eran capaces de ofrecer.

Ahora han cambiado las circunstancias y ya no hay que salir a buscar nada fuera del viejo continente, al contrario debemos defendernos de la presión ejercida por ciertos mercados beligerantes. Sin ir más lejos, China está vendiendo genéricos en España y es lógico que lo haga pues ofrece unos precios con los que nadie puede competir y en estos momentos aquí estamos para ahorrar, eso mandan desde Bruselas. Lo cierto es que la semana pasada hubo que retirar de nuestras farmacias,  por problemas de calidad, dos lotes de cortisonas fabricadas por Zhejiang Xianju Pharmaceutical.

China es un país, lo acaban de volver a mostrar al mundo, con un régimen totalitario donde los derechos humanos se ven mermados y las condiciones laborales son más que precarias. Eso todo el mundo lo sabe, pero el bolsillo es el bolsillo y a la hora de comprar hacemos como el avestruz; al fin y al cabo yo no puedo hacer nada contra la explotación humana en un país tan lejano y complejo.

En Europa estamos perdiendo la dignidad, la coherencia hace tiempo la perdimos.